El horror ha vuelto otra vez,
El cambio liberador
ha acabado en el fango,
tiene sangre en las manos,
sus antiguos compañeros
son ahora unos traidores,
personas ya mayores,
calladas y encadenadas
en habitaciones,
cualquier opinión distinta
es una amenaza,
ya sólo les interesa
mantenerse en sus sillas,
ya no queda nada
de aquellos jóvenes,
empezaron caminando
hacia las metas soñadas,
pero sus pasos se torcieron,
huyen hacia delante,
cada día más aislados.