Momentos convulsos,
anda el rÃÂo revuelto,
el ruido del enjambre
cae desde lo más alto,
y no trae nada bueno,
se desató la tormenta
bastante rápido,
pero la sartén estaba
muy bien agarrada,
en algún lugar se encuentran
siempre al acecho, con ganas
de sangre, el hambre y el miedo,
dispuestos a todo.
Las fotos, las palabras,
escritas y habladas
son bombas pesadas,
muy pero que muy caras.