Sumergido en tu mirada
desconecto de este mundo
y me adentro en un universo
que me embriaga.
Ya no necesito nada.
Serenidad provocada
la pupila dilatada
me siento llevar plácidamente
hacia una plenitud que me calma.
Ya no necesito nada.
Una sonrisa sincera
unos labios me reclaman
siento que estoy en el cielo
del infierno ya no llaman.
Ya no necesito nada.
No existe en ti postureo
tu cercania me abraza
y voy comprendiendo poco a poco
lo que dice tu mirada.
Ya no necesito nada.